El pasado 22 de mayo los chicos de One Direction, arrasaron en el Palacio Olímpico de Badalona, con su gira mundial ''Take Me Home''.
Las Directioners acamparon hasta cinco días para verles lo más cerca posible. Antes del concierto, la gente, mayormente chicas, gritaban, cantaban y sobretodo disfrutaban de ese momento mágico ya que quedaban pocas horas para verles actuar en directo. Una vez dentro, los nervios iban aumentando hasta que los 5 chicos deseados mundialmente salieron al escenario. Muchas fans lloraban y gritaban al tener a sus 5 ídolos tan cerca. Había muy buen ambiente y buena conexión entre el público y ellos. Cantaron muchas de sus canciones, hablaron en español, bailaron y cantaron la macarena y hasta dos de ellos, Harry Styles y Niall Horan, se pusieron la camiseta del Barça para despedirse del concierto. Fue un momento que ningún/a Directioner olvidará jamás.
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